Una imagen se repite desde hace décadas en el pasaije porteño. No importa por dónde andemos, siempre hay uno dando vueltas, rugiendo con su motor y apresurado como pocos. ¿Adivinaron de qué se trata? Nada más ni nada menos que del colectivo, ese tranporte popular que conecta todos los puntos de la ciudad, desde los más céntricos y poblados hasta los más recónditos.
A modo de homenaje, Gabriela Miño del Archivo del diario les dedicó un post súper completo, que no sólo recorre la historia de estos gigantes del asfalto, sino que además incluye un video y varias fotos que ilustran cómo eran y cómo son hoy.