Las fotos de Richard Avedon del Oeste Norteamericano, o las de Lars Tunbjörk en su libro Vinter. O las de Walker Evans en American Photographs, por citar algunos de los autores que se me ocurren ahora mismo, impactan y transmiten con el poder que les otorga el punto de vista de estos fotógrafos. Lo maravilloso está en “lo que ven y en cómo lo ven”.
Los objetos y el paisaje
¿Que si hay objetos en el paisaje? “Si, claro. No hay paisaje sin objetos. Por el contrario, casi nunca un objeto o varios objetos constituyen por si solos un paisaje” Dijo el viejo fotógrafo sin inmutarse casi, y sin desviar la lupa de la plancha de contactos que estaba mirando.
Filosofía de la vida cotidiana
No se puede hablar acerca de la fotografía de André Kertész sin pensar en cómo fue su vida. Nada mejor que el texto de Facundo de Zuviría, escrito para el catálogo de la muestra KERTEZ, EL DOBLE DE UNA VIDA, que se está exponiendo en la Fundación OSDE, en el marco de los Encuentros de la Luz 2012.
Las partículas primordiales
Cuando una foto tiene un componente estético que se impone, abusivamente, por sobre el contenido documental, finalmente será olvidada. Cuando una foto miente mal, se perderá en el mar de fotos en la galaxia de carpetas perdidas en cada una de la computadoras, tabletas, teléfonos y demás dispositivos que habitan esta nube.
Foto, papel y tijera
Si tenés la foto y no tenés el papel, no podés mostrarla. Con la foto y el papel, la imprimís, y la vemos. La tijera es por si tenés más de una foto impresa. Entonces las recortás, y las vas uniendo con hilo y aguja. Será un libro.
Subí una foto a FB
Había una peli, un western famoso que se llamaba “A la hora señalada”. Siempre hay uno, o varios, momentos descisivos en la vida. Y en la fotografía también. Aunque ultimamente nos estamos olvidando de las enseñanzas de H.C.B. y, por impericia o por vocación nomás, nos dedicamos a disparar “momentos felices” para mostrar en la gran vidriera de FB. ¿Vieron las páginas de sus amigos?
Hace dos días hice una pregunta en mi muro: ¿Cuál es el día y hora más bajón de la semana?. Llovieron comentarios! Para mi es el domingo a las 19 hs. Un clásico lo mío. Algunos apostaron al martes. Parece que las chicas ya se parlotearon todo lo que pasó durante el finde, y el martes les queda cómo un vacío… El lunes es otro clásico. El jueves, es el mejor día. A este nadie lo toca. Me sorprendieron algunos comentarios sobre el sábado a la hora de la siesta. Y tienen razón, después de almorzar el sábado te viene una angustia…
¿Y si hacemos una foto para dejar afuera el mal momento y la subimos a un grupo en FB?. Hacé click aquí y subila.. Una condición solamente: que la foto se dispare en el día y el momento preciso. Nada de mentiritas. Esto es un pequeño experimento de fotografía documental. A ver si poniéndolo en una foto, nos sacamos la mala onda. ¿Empezamos este fin de semana?
Recreo!
Todo tiempo pasado fue peor
El sábado fui a la inaguración de “Arte de contradicciones. Pop, realismos y política. Brasil-Argentina 1960”. Puff! título larguísimo, pensé cuando caminaba entre los chiringuitos de la Vuelta de Rocha rumbo a PROA.
El ojo del que mira
No estoy parafraseando al gran libro de John Szarkowski “El Ojo del Fotógrafo”. Aunque quiero citarlo en este post. Es un homenaje a quién más me enseñó en fotografía y punto de partida para mi comentario. Y si digo “el ojo del que mira” es porque hoy por hoy parece no importar mucho que el que mira sea fotógrafo o no.
Me gusta, no me gusta
El domingo visité, junto a unos amigos y colegas, el Salón Nacional. Era el último día y ya cerraba. Recorrimos la muestra con detenimiento y vimos cómo varios de los aceptados iban a sacarse la última foto junto a la obra galardonada. Dimos la vuelta completa al Palais y seguimos la recorrida en la planta baja. Nos divertimos de lo lindo en el Salón Nacional de Nuevos Soportes e Instalaciones.