A principios de este año tuve la oportunidad de ver la muestra 75 aniversario de “American Photographs” de Walker Evans en el MoMA. Una sala no muy grande con 60 fotos colgadas, casi todas, en una misma línea sobre paredes blancas (abajo). Muchas de ellas eran copias de autor de la muestra del año 1938. Eran fotos chicas, si. Pero me transmitieron la misma experiencia (o a mi me pareció) que podría haber tenido si en un viaje sin escalas al pasado hubiera estado en la inauguración original, junto a Lincoln Kirstein, Edward Steichen y Nancy y Beaumont Newhall y el mismísimo Walker Evans! 🙂
La experiencia de “ver fotografías” ha cambiado extraordinariamente desde aquellos tiempos. Ya sabemos: son tantas y tantas las imágenes que nos “ciegan” cada día que, detenerse a mirar una sola por dos o tres minutos es una tarea que demanda mucha energía de parte del observador.
Yo confieso: muy pocas veces hago “la segunda lectura” de una foto. La miro. Me gusta, no me gusta. Si me gusta tal vez me quede unos segundos más observándola. Pero me va a costar bastante encontrar algún detalle relevante, justo el que el autor “plantó” para hacer su comentario!.
Recién me llegó el video de Verónika Marquez (foto encabezando este post) que hace un despliegue teatral, logístico y performático notable para atraer la atención del públiico sobre su autorretrato The Last Supper. Todo su trabajo se originó en una fotografía (arriba) y con el tiempo se completó más y más hasta llegar a la performance que dio a conocer este año en el Matadero de Madrid.
Los entrañables amigos de Sub Cooperativa de fotógrafos, presentaron una antología fotográfica con motivo de su 10 aniversario en el CCRecoleta (arriba). Todavía no fuí a verla, pero estoy seguro que sus fotos son las que conozco (excelentes). Pues ellos también hicieron una puesta espectacular para lograr que el público permanezca un poco más viendo lo que hay que ver: el contenido de las fotos.
Entonces pregunto:
¿Los fotógrafos corremos el riesgo de convertirnos en creadores de espectáculos?
¿Es posible que detrás de un espectáculo bien montado no haya nada de contenido?,
O peor aún: ¿Es posible que el contenido de una foto o un grupo de fotos, se pierda debido al espectáculo montado para mostrarlas?