El 11 se cumplirá un mes del desastre que azotó a Japón. El mismo lapso transcurrió para el colpaso de la central nuclear de Fukushima, que está lejos de tener una solución. En ese contexto, ya no es el periodismo ni el sensacionalismo noticioso, son los expertos en energía y sus órganos políticos quienes piden mayores controles para las plantas nucleares alrededor del mundo.
Precisamente fue el presidente del Consejo Mundial de Energía, Pierre Gadonneix, quien dijo esta semana que la energía nuclear ya no puede ser considerada como un asunto nacional. Gadonneix quiere que todos los países lleguen a un acuerdo sobre normas de seguridad comunes porque dice, cada accidente nuclear tiene “el potencial para causar daños a la salud y al medio ambiente de otras naciones”. Para que puedan tener una idea de lo que hay que controlar, encontré otro fabuloso gráfico interactivo realizado Peter Aldhous, de la revista New Scientist en el que muestra las plantas atómicas, del pasado, del presente y del futuro, que se pueden visualizar según el continente. Falta América del Sur por la poca cantidad de centrales (Argentina tiene dos y Brasil tiene dos).
Fuente: New Scientist Magazine
La idea es que la cuestión de seguridad sea debatida en la próxima reunión del G-20. “Debemos ser conscientes de que hoy hay más de 30 plantas nucleares en desarrollo, el 90% de ellas están en India, China, Rusia y Corea – significa que no se pueden desarrollar estándares de seguridad sin la participación de estos países“, dijo Gadonneix.