Hay varios temas sobre los que quería escribir, pero empezaré de a uno, como corresponde. Hoy les propongo que hablemos de energía. Se habrá enterado que Japón, post Fukushima, se propone encarar uno de los proyectos más ambiciosos en esa materia. Se trata de una ley para reformar sus políticas de energía y promover la energía renovable que ha superado el último obstáculo, la aprobación en la Cámara Alta, que los inversores esperaban para que el gasto en energía renovable aumente. En esta ley se exigirá la compra de electricidad generada por energía solar, eólica, biomasa, geotermica y en menor medida de centrales hidroeléctricas en un plazo máximo de 20 años, informa Europa Press. El Gobierno ha explicado que pretende aumentar la capacidad de los cinco tipos de energía por encima de los 30.000 megavatios en aproximadamente una década.
Esta semana, en rigor hasta el miércoles, pueden ver varias películas que tocan temas ambientales, entre ellos la energía, en el Green Film Fest. En el video les dejo el corto ganador del concurso Semillero, que se refiere a la cuestión y deja bastante qué pensar. Se llama Arbol, dirigido por Lucas Schiaroli, y plantea cómo un hombre, padre de una humilde familia campesina, puede mantener el calor de su hogar durante el invierno contando con un sólo árbol en toda la región.
Volviendo al proyecto de ley japonés, quedan sin resolver detalles relevantes que pueden diluir el impacto de esta nueva política energética, como el precio de los servicios públicos en cada una de ellas, que no será determinado por el Parlamento al menos hasta el año que viene.