La revelación del contenido de una causa judicial jaquea al gigante Monsanto. La compañía está señalada de escribir en nombre de otros literatura científica que llevó a un regulador estadounidense a concluir que un producto químico clave en su herbicida Roundup no debe clasificarse como cancerígeno.
Los abogados que demandaron a la compañía en nombre de agricultores y otros, que afirman que la exposición al glifosato causó su linfoma no Hodgkin, alegaron en una acción judicial que fue parcialmente ocultada hasta el martes que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) “podría no ser consciente de la práctica de autoría engañosa de Monsanto”.
La presentación fue hecha pública por Vince Chhabria, juez federal en San Francisco. El magistrado dijo el mes pasado que está inclinado a exigir a un funcionario retirado de la EPA que se someta a un interrogatorio por parte de los abogados de los demandantes que sostienen que tenía una relación ” altamente sospechosa” con Monsanto. El ex funcionario supervisó un comité que encontró pruebas insuficientes para concluir que el glifosato causa cáncer y dejó su trabajo el año pasado después de que su informe se filtró a la prensa.