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Durante 2016 nuestro equipo compartió muchísimos momentos interesantes con la comunidad de datos abiertos y acceso a la información.

Todo esto nos permitió ir armando un punteo de los principales desafíos, debates y aprendizajes de 2016 que resumimos a continuación:

Hay que ser más cautelosos con el uso de la palabra “impacto”: ya desde comienzos de año y luego de varias charlas con Silvana Fumega comencé a dudar del excesivo uso y certeza con la que muchas veces de habla de “impacto” de datos abiertos. En AbreLatam, Tim Davies reforzó el mismo punto: “Tenemos un número cada vez mayor de conjuntos de datos publicados por los gobiernos. Los portales de datos abundan. Y hay muchas personas que ahora trabajan en roles que implican crear, mediar o usar datos abiertos. Pero todavía tenemos una brecha de impacto”.

“Open washing”: hay que  tener mucho cuidado con las “fachadas de apertura”.  Este año se habló de este fenómeno como nunca antes; no sólo desde el lado de la investigación sino al interior de las comunidades.

Foco en la demanda de datos abiertos:  debatimos mucho sobre la calidad de los datos y su generación por parte de gobiernos y organizaciones (“suppliers”) pero el debate también pasó por cómo generar demanda para el uso y reutilización.

Calidad de los datos: mesas y talleres hicieron hincapié no sólo en la tarea de que los gobiernos comiencen a liberar más información y con foco en las necesidades de los usuarios; sino también en cómo se generan esos datos desde el mismo momento en el que se producen.

Estándares: en los eventos previos a 2016 se conversó sobre estándares a la hora de publicar datos. Este año se sumó un nuevo momento de reflexión: comenzó a discutirse sobre estándares de conservación.

Desarrollo de capacidades al interior de los gobiernos y las organizaciones: en comunidad, debatimos sobre estrategias políticas y educativas para crear habilidades en las personas.

Aumento de la participación del periodismo en todas las discusiones: conversamos para la necesidad de involucrar más a los medios en temas de datos abiertos y acceso a la información.

Durante la reunión global de la Alianza para el Gobierno Abierto, muchos de los participantes y miembros del Steering Commitee destacaron la necesidad de que los periodistas participen de las discusiones de los planes de acción de los países y de los procesos de OGP en general.

Algunas preocupaciones

Desconexión entre la agenda de acceso a la información y datos abiertos en los gobiernos: esto no se ve sólo en la práctica sino también en los organigramas de algunos gobiernos.

Ampliación de la comunidad: este punto es una de las mayores preocupaciones. Cómo hacemos para involucrar nuevos actores.

Problema en el uso de ciertas definiciones y relaciones: siguen apareciendo muchos “binomios causales”: “Publicamos todo; somos transparentes”; “Tenemos portal de datos abiertos; hacemos gobierno abierto”, etc. La definición de gobierno abierto se usa en múltiples ámbitos y no siempre de manera correcta.        

Falta de apertura de metodologías: no estamos contando “cómo hacemos lo que hacemos”. Uno de los principales desafíos de nuestra comunidad en 2017 es la documentación.

Todavía se habla muy poco sobre “las cocinas” de los proyectos. Abrir datos es abrir metodologías también.

Necesidad de discutir temas “incómodos”: los temas de vigilancia, privacidad y datos personales estuvieron ausentes de programas de eventos.

Aún falta mucho acercamiento a los usuarios: en general los gobiernos y las organizaciones que abren datos no generan espacios de consulta para la priorización en los momentos de apertura.

“Abrimos el código, todos pueden usarlo”: se requiere de un conocimiento técnico y habilidades y capacidades específicas para “replicar contextualmente” los proyectos. Que el código esté abierto no implica su reutilización sencilla ni automática.

Más pedidos de acceso a la información incómodos: los pedidos de acceso a la información se han convertido en un aliado excepcional para conseguir datos abiertos o actualizaciones de documentos públicos. No hay que descuidar su otro costado. Se necesitan más preguntas con una estrategia clara para “echar luz” sobre temas no conocidos.

Ausencia de discusiones sobre educación abierta: aún no está en agenda la preocupación de que nuestra comunidad genere Recursos Educativos Abiertos (REA) o discuta sobre procesos de educación por fuera de los parámetros tradicionales. Las universidades se están quedando atrás en cuanto a la generación de nuevas habilidades. Ahí nuestra comunidad puede adquirir un rol protagónico que aún no está en el centro de la escena.