Esta semana descubrí InstaStock, un nuevo servicio que permite a los fotógrafos amateur vender sus mejores Instagram y fotos capturadas con smartphones.
El objetivo de esta compañía es crear “la base de datos más grande del mundo de imágenes auténticas, creativas y de actualidad”.
El incentivo para que la propuesta pueda crecer es que los fotógrafos aficionados ganen el 50 por ciento de comisión por cada descarga que se realice de la foto, con una cifra ilimitada por semana.
Tengan paciencia: por ahora hay que pedir una invitación para utilizar el servicio.
Introducing InstaStock.com from InstaStock on Vimeo.
El banco de imágenes apunta a clientes como productoras de cine y TV, medios de comunicación digitales, agencias de publicidad y otros grandes consumidores de fotos.