Sobre el helado y otras sustancias afrodisíacas

Buena noticia para los que comen yogur de vainilla. Según un estudio publicado en la revista Food Research International consumir esta vaina, parienta de las orquídeas estimula la sensación de felicidad, lo que vendría a reforzar la teoría de sus propiedades vigorizantes, tal señalan estudios botánicos de larga data. Lo que sí, mejor que yogur sería tomarla en versión helada. Me dice un amigo radicado en Florida (EEUU) que sí, es cierto eso de que por su zona suele circular de noche un camioncito que vende helados de sabores afrodisíacos, el Ahrodisiac Ice Cream Truck, una gran idea del fotógrafo Justin Price, que descubrió y armó el negocio. Ya el simple gesto de lamer un cucurucho causa cierta sugestión, doble efecto si sabe a chocolate, frutilla o vainilla, ingredientes a los que el ser humano le ha conferido poderes pólvicos.

Según la revista Muy Interesante la primera en descubrir el costado erótico del helado fue Catalina de Médicis, que ya en el siglo XVI le cocinaba cenas orgiásticas a su marido Enrique de Orleans para levantarle la moral cuando éste andaba sexualmente pachucho. El menú incluía una crema enfriada según técnicas avanzadas de la época (comprimían la nieve en pozos aislados con pasto, paja y ramas de árboles). Si bien atribuirle a ciertos alimentos capacidad para aumentar el goce o despertar el deseo es como creer que las gallinas vuelan, es cierto que el contraste de temperaturas activa el organismo y que la vainilla y el chocolate ostentan propiedades que favorecen la circulación. El consumo, combinado con una dieta rica en omegas, ayudaría a que la sangre fluya sin escalas a los genitales, procurando erecciones y orgasmos naturales, dice la ciencia.

Chupáte ese heladito SexyMuse.com  Kristina Yenko

Casualmente hace una semanas contacté a un especialista en fitomedicina, quizá el más prestigioso de los médicos argentinos en la materia, el Dr. Jorge Alonso (Director del Posgrado de la UBA en Fitomedicina), para consultar sobre unas supuestas hierbas “orgásmicas” que encontré en una farmacia de mi barrio. Me había parecido sospechoso el envoltorio, una bolsita de papel con etiqueta escrita a mano, sin más datos. Les comparto parte de la información que envió generosamente a propósito del tema afrodisíacos, y sugiero que si en lugar de helado van por algún yuyo o sustancia, lean bien y consulten. No sea cosa que la pócima haga el efecto contrario!  Seguir leyendo

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