Me han invitado a un Festival de Yoga en los bosques de Palermo, y aunque no soy muy de meditar y relajar, sé que esta disciplina es sumamente poderosa para aquietar la cabeza y calmar los demonios pero, sobre todo, mi gurú en la materia jura y perjura que el yoga no solo abre el apetito sexual sino que la práctica continua ayuda a aumentar el placer. Según mi yogui amiga (y los investigadores de la Escuela Médica de Harvard, en ese orden) la repetición de ciertas posturas o “asanas” durante al menos doce semanas seguidas logra despertar el deseo, la excitación, mejorar la lubricación y obtener más orgasmos en las mujeres de 22 a 55 años. Tomen nota!
Claro que no hace falta la bendición de la ciencia para confirmar las bondades de esta milenaria disciplina oriental que ya en la India, patria del Kamasutra y el Ananga Ranga, es tan cotidiana como el curry. No porque sí allí se han escrito estos best sellers del erotismo. A Occidente le cuesta creer, pero la investigación que da el veredicto se hizo hace unos años entre 40 mujeres casadas o con pareja estable que durante un periodo de tiempo se prestaron a practicar 22 de las posturas del yoga. Al cabo de ese tiempo no solo demostraron estar de mejor ánimo y tener buen tono muscular, sino que aquellas que bordeaban los 50 confesaron además sentirse estimuladas y haber conseguido varios orgasmos en una sola sesión. Otra investigación publicada en The Journal of Sexual Medicine mostró que el yoga también beneficia a los hombres ayudándolos a controlar la eyaculación precoz.
tampoco era para tanto! flexigirls.Pinterest
Lo que ignoro es si las posturas más recomendadas para los fines eróticos abarcan todos los tipos de yoga, me refiero, y con perdón de los expertos, si se encuentran en el repertorio del ashtanga, el iyengar, hatha y las demás variantes que invitan a practicar este domingo en el festival. Según los yoguis, Upavistha Konasana, Setu Bandhasana (o la pose del puente que trabaja los músculos del suelo de la pelvis, permitiendo orgasmos intensos), Padmasana (la figura del loto promueve la flexibilidad de los músculos de la cadera y los muslos, fundamentales para la agilidad), Halasana (el arado, aumenta el flujo sanguíneo al cerebro mejorando el estado de alerta, además baja el riesgo de lesionarse en el encuentro), Garudasana (mejora la circulación en la zona cervical, lo que puede aumentar la sensibilidad durante el acto) y Utthan Pristhasana (como el loto, el lagarto da flexibilidad en las caderas y pelvis) son las posturas para repetir a diario, en lo posible.
Para los interesados, la cita es este domingo en Av. Libertador y República de la India, desde las 12. Es gratuito y el que quiera puede llevar alimentos no perecederos para donar a los habitantea del Chaco, a través dela fundación Argentina Ayuda a Argentina.