Vengo de la verdulería de mis amigos peruanos con la bolsa cargada de manzanas, las más rojas, jugosas y turgentes que se hayan cosechado en las tierras de Rio Negro. Los chicos preguntan que voy a cocinar de rico y les digo que seguramente alguna tarta, o bien así nomás, para comer al natural. Básicamente son para compartir con una buena amiga que anda pachucha de ganas. Ha probado con todo, con yuyos, con porno, y nada. A veces la inapetencia sexual dura más de lo que deseamos, valgan las redundancias, de modo que nada se pierde con darle chances a esta fruta simbólica y pecaminosa cuyas virtudes ya se han estudiado bastante.
Cuando eras chica escuchabas eso de que una por día aleja al médico de tu vida, pero parece que las únicas propiedades comprobadas son las que nos adelantó la Biblia, no porque sí Adán y Eva se enredaron en la cama luego de moder manzana y no melones ni naranjas.
Hace pocos años un grupo de médicos italianos del Hospital Santa Chiara, de Trento, convocaron a 731 mujeres sanas y sexualmente activas de entre 18 y 43 años para probar los efectos de este manjar divino. Dividieron a las damas en dos grupos, unas debían ingerir dos manzanas por día, las otras ninguna. Después de un tiempo a dieta se les hizo llenar el cuestionario del Índice de Función Sexual Femenina (IFSF) que plantea 19 preguntas sobre aspectos concretos de la vida sexual (se los linkeo por si quieren responderlo), como frecuencia de relaciones, cantidad de orgasmos, lubricación y satisfacción, y ahí encontraron que quienes habían comido las dos manzanas al día alcanzaban mejores resultados, oséase, obtuvieron mejor función y respuesta erótica. Es creer o reventar, o querer creer, que vendría a ser lo mismo.
Soy tu manzana… mullynet-Pinterest
Los efectos de la manzana, llena de vitamina A, en la sexualidad femenina podrían deberse a la combinación de dos sustancias clave como son los polifenoles y la floridzina. Los polifenoles están presentes en varios alimentos activadores de la circulación sanguínea, conduciendo el torrente la hasta donde se debe. Los investigadores explican que, “al igual que el chocolate y el vino tinto, las manzanas contienen polifenoles, antioxidantes vegetales que mejoran el riego sanguíneo a la zona genital y la vagina, lo cual propicia los orgasmos”. La floridzina es una sustancia semejante a la hormona sexual femenina estradiol, con efectos concretos en la lubricación y el deseo.
Está de más decir que no es comerlas y sentarse a esperar que hagan efecto. Se trata de ingerirlas con regularidad y dentro de una dieta sana, libre de grasas malas, de hacer ejercicio físico y sobre todo de poner la cabeza a imaginar, porque las fantasías son la única nafta del sexo.