La leyenda de las Tigresas Blancas y el sexo

 

Tiempo atrás supe de una rara hermandad de mujeres taoístas que en la antigüedad fueron algo así como unas Dráculas del sexo oral, pues cultivaban estas artes no por placer sino con el único fin de retrasar el reloj biológico y así permanecer jóvenes y tersas for ever.

Sabemos muy bien que la falta de documentación confiable alienta este tipo de fábulas, mitos y especulaciones alrededor de los temas eróticos, pero héte que en este caso varios libros dan cuenta de la existencia de las Tigresas Blancas, una secta de chicas cultoras de la felación terapeùtica, léase, como la manera más rápida y eficaz de absorber la energía sexual masculina, según narra Hsi Lai en sus Enseñanzas sexuales de la tigresa blanca: los secretos de las maestras taoístas (se consigue en las librerías porteñas).

Fuí a consultar mi bibliografía de cabecera ( Gran enciclopedia del Sexo, de oscar Urbiola) recordando que para el Tao el sexo es parte esencial de una relación y que “su ausencia enferma el amor”. La religión promueve la práctica continua del contacto carnal entre humanos por ser bueno para la mente y el espíritu, redundando en belleza y longevidad para los amantes, dicen los textos. Pero las Tigresas blancas (en nada parecidas a las geishas japonesas) no esperaban promesas de amor: eran solitarias y promiscuas por gusto, no tenían ni querían pareja estable ni se enamoraban de ninguno de sus decenas de amantes.

Tigresa italiana…..via marvelous

Eso sí, Trigresa no era cualquiera. Había que entrenar durante nueve años y debutar muy joven para poder ver los “resultados” del tratamiento (como cualquier antiarrugas…¡siempre el largo plazo!). Consideradas prostitutas incluso por la rama ortodoxa del taoísmo, se apodaron así en referencia a las hembras de esta especie felina que deben copular más de cien veces para quedar encinta, dado que necesitan una cantidad superior de esperma que otros animales. Como deben atraer a muchos gatos para llegar a la meta, se cree que estas criaturas son grandes seductoras.

Drácula en acción foto Cordon Press

La leyenda dice que una mujer puede rejuvenecer entre cinco y quince años si sigue la receta al pie de la letra. De esa forma podía retrasar la menopausia y sus devastadores efectos. El beneficio de tanto sexo oral estaría en las propiedades del líquido seminal o “lágrimas de dragón”, que ellas aplicaban a modo de rema humectante. En fin, que las tigresas modernas se aplican relleno y botox, y si de casualidad consiguen sexo, no siempre es con final feliz. Eso sí sería un milagro, como la eterna juventud.