La escena sucedió cuando ya había amainado el enfrentamiento entre los seguidores del club Vancouver Canucks y los del Boston Bruins. Los hinchas se habían ido a los puños durante la Stanley Cup, el torneo de hockey sobre hielo que en Canadá tiene la importancia de la Copa Libertadores en América o a la Champion League europea.
En algún momento de la balacera una mujer cayó al piso, supuestamente golpeada, y no sé si es que nadie corrió en su ayuda (la indiferencia del uniformado es notable) o si fue solo su novio, o su amor (o un avivado) que, viéndola desvalida en el asfalto, en un gesto romántico, corrió a asistirla con un beso a lo Doisneau.
Rich Lam, de la agencia AFP alcanzó a capturar ese instante tan efímero y fugaz en el que la realidad queda suspendida para siempre. Así de poderosa y mágica es la fotografía…