Hace unos horas corrió la noticia en varios diarios del mundo de que el trágico accidente del vuelo Air France 447 que cayó al Atlántico en 2009 causando la muerte de 228 personas habría sido porque el capitán del avión, Marc Dubois, estaba manteniendo relaciones sexuales al momento del incidente.
Según la cadena ABC News, Dubois estaba en su hora de descanso acompañado de una azafata llamada Veronique Gaignard cuando la nave quedó atrapada en la tormenta. “Al parecer los copilotos avisaron inmediatamente al capitán para que regresara a la cabina, pero éste tardó más de un minuto en contestar a sus compañeros” dice el informe.
La azafata y el piloto Foto vergroBen
El problema posterior fue que el copiloto no supo controlar la nave y en cuestión de segundos el avión cayó el picada al agua, pero parece que Dubois reaccionó tarde, según la caja negra, que registró su voz cuando preguntó a sus colegas”¿qué está pasando?”.
No sabemos, ni sabremos nunca, si ésto ha sido verdad, pero sin dudas la magnitud del hecho trasciende la anécdota del sexo, aunque creo que ni la muerte redime a los amantes áereos, como el italiano que conducía el crucero, de semejante desliz.
No es para chistes.