¿Te gusta el sexo en grupo? Si la respuesta es sí, éste libro te puede interesar. El intercambio de pareja es una práctica mal llamada orgía que existe desde tiempos remotos, y que algunos miembros del club prefieren mantener en privado, mientras que otros suelen ventilarlo con la mayor naturalidad. La fotógrafa Naomi Harris perdió hace poco su puesto de trabajo en una conocida editorial luego de que en su país se reeditara American swings, un verdadero registro antropo-fotográfico publicado por Taschen el año pasado y en el que Harris revela detalles reveladores (valga la redundancia) sobre la vida sexual de los swingers de los Estados Unidos.
Si la autora del libro se metió conc uerpo todo en el tema (si se plegó a las costumbres mientras hacía el estupendo trabajo periodístico) es cosa de ella, pero parece que su devoción por el tema le costó la condena de sus jefes, que no vieron con buenos ojos el que haya estado en esos escenarios. Las tomas son audaces, para qué negarlo. En el libro vemos, por ejemplo, a tres felices parejas de adultos entrados en kilos, ellos mirando alegremente la tele mientras ellas les practican sendas felattios. En otra una señora tira de un carro que tiene el capó en forma de pene.
Al decir de la fotógrafa, que recorrió el país visitando grupos que eligen vivir de esta forma comunitaria, la gente la recibió muy bien, ya que los swingers son en su mayoria muy educados, de clase media alta que paga impuestos, manda a sus hijos al cole, hace compras en el supermercado… y el sábado hace el party y el domingo va a misa.
Aclaro que no tengo ninguna opinión personal sobre el club de los intercambiadores de pareja, tema que también traté en mi libro. Al contrario, me parece que si son felices compartiendo en comunidad y sin molestar a nadie, eso es lo más importante. Sí puedo decir que me choca ver gente que se exhibe en cueros o habla de su intimidad delante de terceros.
Por lo otro, el material del libro es visual y culturalmente muy interesante, como lo es todo lo desconocido, o distinto del mundo personal. Además la calidad de las fotos es inmejorable. Lástima que en las librerías locales no se consigue.