Habrá que mirar a los gorditos con más cariño. Si antes solo causaban simpatía y algunas mujeres no podían imaginarse retozando con un hombre de vientre planetario – ya que no es signo de vitalidad sino al contrario, según dice la literatura médica sobre el colesterol y demás- ahora el mito está punto de ser derribado. Parece que los individuos de contextura maciza tienen más resistencia durante el acto sexual que un flaco fibroso. La investigación realizada por científicos de la Universidad de Erciyes en Kayseri, Turquía, revela que a mayor índice de Masa Corporal (IMC) más tiempo pueden durar en relación sexual. Según los resultados, los varones obesos y de panzas pronunciadas duraban 5 minutos más que los delgados.

ni una cosa ni la otra! 

Durante un año estudiaron la experiencia de 200 paticipantes y llegaron a la conclusión de que los varones con un IMC más alto duraban aproximadamente 7.3 minutos durante el coito, mientras que los delgados apenas 2 minutos (…ups, gran diferencia). Es decir que si un hombre gordito tiene relaciones 100 veces al año, pasaría alrededor de 8 horas más con su pareja que si tuviese abdominales tipo tabla de lavar, calculan los mismos autores del trabajo. Los científicos consideran que a mayor grasa abdominal, el varón produce más estradiol, una hormona femenina que ayuda a inhibir el clímax. Claro, no es concluyente. Esto no quiere de decir que sean mejores o peores en la cama. Otra investigación publicada mucho antes en la revista The Journal of Sexual Medicine sugirió que los parámetros antropométricos (peso y estatura) sí pueden ser indicadores reales de la frecuencia sexual. Entre 531 participantes heterosexuales de entre 20 y 54 años encontraron que, en promedio, los hombres de características físicas menos llamativas (menos de 1,75 de altura y 78 kg) y con una circunferencia de cintura normal, fueron los que con más frecuencia mantenían relaciones. En cualquier caso, creo que a preferimos los gorditos….