Hablando con un amigo de lo que nos depara a los solteros el mundo de las redes sociales descubro que no soy la única que elige mal, sistemáticamente, en los sitios de citas (y en la real realidad). El que me gusta siempre viene taimado, complicado y definitivamente no es para mí. Termina demostrándomelo la primera cita, pero yo insisto, taurinamente. Es que uno es hijo del rigor, incluso en el cuarto oscuro que es la virtualidad. Si me gusta, normal del todo no es, eso ya lo sé. Pero me gusta, quévaser!
Felizmente Tinder, que no deja de desarrollarse e investigar atajos para seguir conectando a los millones de ilusos que navegamos buscando un sex match, sacó al mercado la versión más cercana a la perfección: si, llega el Tinder Manos Libres. Si ayer uno hacía swap a mano, marcar cruz o corazón con el dedito ya acalambrado (en mi caso), opción que permite mandar a la derecha a las fotos que nos gustan y a la izquierda las descartadas, ahora a ese trabajito lo hace tu pulso, tu propio corazón. Es una especie de relos cucú, como deciamos los cordobeses en honor al monumento de Carlos Paz.
que tu pulso te guie hasta mi… sunshinecafé
Tinder Manos Libres (Hands Free Tinder) se instala en un reloj inteligente tipo el Apple Watch y solita la app funciona midiendo las variaciones de tu ritmo cardiaco. Y es tan tan sensible que cuando tu pulso se altera ante alguien con cierto potencial, inmediatamente líkea a favor, y si el pulso no se mueve es que realmente él o la candidata no te mueve nada. No sé si este recurso servirá en mi caso.
Primero no tengo esos relojes que tiene mi médico, por ejemplo, que mientras hace la receta le sale algun garabato cada vez que entra un mail a su buzón. Además soy cazadora morbosa de espécimenes extraños, esos que posan con el perro chuponéandoles la cara, o los guapos en tsunga apoyados contra una palmera y tomando jugo de coco en pajita, ah y el galán ostentando bienes y dientes recién comprados (aclaro que ellos no me likean). Ya ven, me espera una larga, larguísima, soltería! Pero si este sistema funciona, y me compro el reloj y el like lo da mi verdadero yo, entonces sí estoy esperanzada en dar con un verdadero señor.
El problema se presentará cuando la plataforma quede atosigada por el pulso acelerado u otro problema técnico, como sucede en mi vieja Tablet, que no me deja subir fotos ni cambiar la edad, ni siquiera modificar las preferencias, de hecho me está buscando gente a 10 mil kilómetros de distancia cuando soy de quedarse lo más cerca posible del barrio. En fin, que el corazón me lleve hasta vos!