Algunas situaciones desafortunadas suceden en el momento justo en el que comenzamos a desvestirnos frente a una “nueva cita”, con esa la teatralidad impostada que nos vende el cine, tratando de lucir irresistibles y disimulando con dignidad el pánico escénico de quedarnos sin ropa. En plena avalancha de adrenalina pueden suceder fatalidades, por ejemplo, que se rompa el cierre del pantalón y no baje, que queden restos de papel higiénico pegados en los genitales luego de haber ido al baño, o peor es si te ha pillado la urgencia sin una bombacha decente. Pero todavía hay algo peor: que tu partenaire quede en cueros y olvide sacarse las medias.
Uno de los más flagrantes delitos contra el sex appeal masculino son las medias para hombres. Y no hay marca que haya podido imprimirle cierto encanto a esta prenda interior. Pienso en los turistas alemanes y japoneses que pululan por las ciudades del mundo mapa en mano, mirando para arriba con aire perdido y vestidos con bermudas, sandalias y soquetes. Si son blancas, más desafortunadas. Conocí a un joven encantador hace años que confesó dormir con bolsa de agua caliente y medias, no las de todo el dia, sino un par agujereado que había comprado en Casa Suaya. Cuando me lo dijo lo imaginé inmediatamente y ahí supe que jamás me acostaría con él. Así de estúpidas somos algunas mujeres. Pero a los fines prácticos las medias son útiles para el sexo, dice la ciencia que todo lo prueba y lo divulga…
más rendidor es tener “caliente” la cabeza via shootingsuperstars
Aunque sea chocante para el ojo (al principio, después qué mas dá) dormir con las medias puestas eleva la temperatura corporal a niveles óptimos. Según un estudio realizado por la Universidad de Groningen (Holanda), “llevar esta prenda durante las relaciones sexuales facilita a ambos sexos la llegada al orgasmo”. El autor de este trabajo, el neurocientífico Gert Holstege, investigó que parte de nuestro cerebro trabaja mejor cuando alcanzamos el clímax y comprobó que el 80% de las parejas consultadas llevaban los pies ensoquetados en el momento cumbre, frente a un 50% de aquellos que prefirieron quedarse descalzos. Para la sexóloga Crsitina Callao, consultada a propósito del estudio, “cuando la temperatura de nuestros pies es lo suficientemente cálida y confortable, mantenemos la autorregulación de nuestro cuerpo y, de este modo, la sangre irriga de manera directa al clítoris y los genitales masculinos”. Claro, todos estos beneficios se dan supongo cuando las medias están limpias, y los pies también. Apuntando las medias, que además llego el frío!