¿Acoso sexual o seductora “serial”?

 

Daniel cuenta que a su novia la conoció en la milonga y que apenas la sacó a bailar, en la pausa del primer tango de la tanda – esos segundos que se hacen de chicle y que algunos llenamos con frases idiotas, del tipo ¿viste cuánta gente vino hoy? o ¿vos, de dónde sos?– ella, calladita y sin decir ni mú, estiró la mano y empezó a acariciarle el pelo. Nunca antes se habían visto. A él, lógicamente, se le prendió fuego el cuerpo…¿acoso sexual o simplemente una seductora compulsiva?

ustedes son tremedas, justificó la “víctima”…. (como si yo no lo supiera)

kate bellm via pain branche

disculpá, mientras preparabas el café me puse cómoda Kate Bellm via pain tranché

En algo coincido: efectivamente, se está perdiendo el arte del levante, la sutileza. No digo que ya no queden románticos de manual dispuestos a “trabajar” para ganarse la cena, pero habiendo caído muchos hombres y mujeres en el extremo de la histeria, el abc del cortejo parece estar siendo superado por la precocidad contemporánea, esta urgencia por tenerlo todo, y tenerlo YA.

Sin dudas “apurar”  a una persona es una pésima estrategia, aunque admitamos que en algunos casos, mientras el tímido no se anima y el metrosexual no define, de algo hay que vivir. Por eso, y sin justificarla, quiero solidarizarme con Britney Spears, que inspira este post y a quien, creo, se ha juzgado apresuradamente.

En los Estados Unidos no podés levantar un solo dedo sin que alguien se sienta señalado, y te denuncie por eso. Debe ser difícil ser una celebriti allá, mucho más ser una celebriti torpe y obvia como esta chica, cuyo único pecado, a mi modesto entender, ha sido sentirse atraída por el “musculoco que le cuidaba la espalda, y que no era precisamente su empleado sino el empleado de una empresa de seguridad. Quizá ella intentó conquistarlo como mejor le sale, a lo bruto, con la herramienta que considera más eficaz: su cuerpo.

britney

Pero el tipo no tenía el sí fácil. Como no se creyó el Kevin Costner de la película, Fernando Torres la denunció por acoso sexual. Dijo que en más de una oportunidad ella se le apareció semidesnuda e “hizo actos sexuales en su presencia”, razón por la que el joven de 29 años ahora reclama una indemnización por “daños”.

Que te pretenda una starlet como Britney Spears para algunos, más que daño, puede redituar en un aumento del handicap. Bueno, también es cierto que si estás casado y no te gusta que te provoquen, estás en tu derecho de patalear.

Sin compartirlo del todo, definitivamente me cabe más el estilo de la flamante novia de mi amigo Daniel. Hizo un trabajo muy fino: él ya anunció por Facebook que está en una “relación sentimental” .