Casualmente una colega me pregunta que fue de los cines porno de esta ciudad y le cuento que creo que quedan pocos, para heterosexuales, al menos, pues entre otras razones hoy la industria del XXX está muy “competida” por los canales de porno casero, que cualquiera puede ver (y filmar) desde (y con) cualquier dispositivo. Pero de la pregunta surgió la repregunta: ¿esas escenas protagonizadas por gentes del montón y no por modelos superdotados y chicas multiorgásmicas y jadeantes, son necesariamente sexo real? Hum…qué decir?
Este simpàtico video que oportunamente me acercó un amigo ilustra con ingeniosas metáforas gastronómicas la diferencia entre una cosa y otra, aunque no responde la última pregunta…Diviértanse, es apto para todo público!