Hace tiempo siento tirones en mi dedo meñique. Quizá sientas lo mismo en el tuyo. Quizá en breve empieces sentir que tira más, y más fuerte. Ojalá no sea un calambre sino el Hilo Rojo del destino que, finalmente, después de tantas vueltas e idas, de tanta vida gastada por ahí, nos ponga frente a frente….(lapsus romántico!)
Le dedico este post a una amiga que hace un tiempo me preguntó si sabía del significado de esta leyenda japonesa (o china, no es preciso su origen) que dice que todas las personas destinadas a conocerse tienen un hilo rojo atado en sus dedos. Según reza nacemos con ese hilo que permanece atado en la punta del dedo a pesar del tiempo y la distancia. No importa cuanto tardes en conocer a esa persona, tampoco si esa persona vive del otro lado del mundo: la hebra puede estirarse hasta el infinito. Se tensa más o menos a lo largo de la vida, a veces afloja y hasta parece cortarse. También se enrieda mucho. Más nunca se corta.
“Así es que, el Abuelo de la Luna, cada noche sale a conocer a los recién nacidos y a atarles un hilo rojo a su dedo, un hilo que decidirá su futuro, un hilo que guiará estas almas para que nunca se pierdan”, dice la leyenda, que les copio literal más abajo:
sé que estás llegando…..icantouchyouthere
“Hace mucho tiempo un emperador se enteró de que en una de las provincias de su reino vivía una bruja poderosa quien tenía la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino, y la mandó a traer ante su presencia. Cuando la bruja llegó, el emperador le ordenó que buscara el otro extremo del hilo que llevaba atado al meñique y lo llevara ante la que sería su esposa. La bruja accedió a esta petición y comenzó a seguir y seguir el hilo.
Esta búsqueda los llevó hasta un mercado, en donde una campesina con una beba en brazos ofrecía sus productos. Al llegar hasta donde la campesina, la bruja se detuvo frente a ella y la invitó a ponerse de pie. Hizo que el joven emperador se acercara y le dijo: `Aquí termina tu hilo.´ El emperador enfureció creyendo que era una burla de la bruja, entonces empujó a la campesina que aún llevaba a su hija en brazos y la hizo caer, haciendo que el bebé se cortara la frente. Ordenó a sus guardias que le cortaran la cabeza a la bruja.
Muchos años después, llegó el momento en que este emperador debía casarse y su corte le recomendó que lo mejor sería que desposara a la hija de un general muy poderoso. Aceptó y llegó el día de la boda. Y en el momento de ver por primera vez la cara de su esposa, que entró al templo con un hermoso vestido y un velo que la cubría totalmente, al levantárselo, vio que ese hermoso rostro tenía una cicatriz en la frente.”
Se cree que este mito se inspira en un hecho biológico: en la arteria ulnar que conecta el dedo meñique con el corazón, mediante la arteria braquial. El hilo rojo (la sangre) simbolizaría el amor y el interés común. Traducido: la persona para uno llega inesperadamente, y quizás no es como la imaginamos. Pero la conexión será tan fuerte que trascenderá cualquier diferencia.
buen finde, y que les tire el dedo!