Para qué mirar telenovelas si la realidad supera siempre la más tórrida ficción. Una lectora que acaba de estrenarse en este blog mandó un comentario tan largo y fascinante como imposible de aprobar por estar plagado de palabras y metáforas dignas del Youporn, divinamente escritas, solo que…. linda, ¡leéte el reglamento de participación!.
Igual rescataré parte de su historia, porque a ella también se le escapó el nombre de otro estando en lo mejor. Pero el nombre que pronunció era el nombre del ex marido de su mejor amiga...that´s the point
¿estoy soñando o sos el ex de “la” Silvia? loveandbubbles via lavitaebella
Que situación compleja. Dice que mientras fue pertenencia ajena nunca había fantaseado con él, y que no lo había vuelto a ver desde que se divorció de su amiga.
Pero hace unos veranos se lo cruzó frente a la góndola de los congelados en un supermercado de Pinamar, cuando iba empujando el changuito vacío y él caminaba distraído mirando precios, canasta en la mano, recién salido de la playa, bronceadito, con arena en los pies y los labios medio brillantes por el blanco neón del protector solar (imagino yo). El le sonrió, y ella cayó “flashada”….
Varias noches después de aquel encuentro espontáneo, dice, se volvieron a ver de casualidad en un restaurante de Cariló, y ahí no tuvo dudas: el tipo le gustaba. La imagen anterior que tenía de él se había diluído por completo. No lo recordaba como ese sujeto de pocas palabras que vivía adherido al sofá y al control remoto del televisor, que nunca secaba el baño después de la ducha y que cuando estaba de mal humor no metía bocado en las reuniones sociales. Trabajador, eso sí.
A sus ojos, ahora, era un espléndido (y, ¿quién no lo es en verano?). En los meses psoteriores a las vacaciones se buscaron por Facebook y empezaron una relación afectiva sin sexo pero llena de morbo, y en silencio. La noche en que se le escapo su nombre, su pareja ya estaba casi terminada. Ahora está libre, pero no se atreve a blanquear la situación.
mejor que quede en sueños…sunsurfer
Qué decirte, Elenita. Solo puedo agregar que los ex de mis amigas – aunque estén rebuenos y yo ande en la lona (de amores) – son “asexuados”, siguen siendo sagrados, inasequibles. Son hombres con los que comparto un pasado, y además no solo les conozco las ñañas, la trastienda, sino que el sexo con ellos me daría muuucha impresión… ya saben. Pero eso no quita que alguna vez me haya hecho la película con alguno, porque las fantasías y los sueños eróticos son caóticos y absurdos, pero siempre inofensivos, por más que propicien una encantadora doble vida (onírica). Como dicen los especialistas, una cosa es “el contenido manifiesto y otra las ideas inconscientes que generan”.
Lo mejor siempre y en cualquier caso es enfrentar la verdad, aunque nos cueste un vínculo valioso. O quizás no: tal vez es una amiga inteligente, capaz de separar el trigo de la paja.
En fin.