(A propósito, Stallman también escribió el primer compilador libre y Emacs, por lo que su contribución al software libre no fue sólo ideológica y legal, sino que también creó las herramientas esenciales para construir todos los demás sistemas y programas que seguirían, incluyendo el núcleo de Linux, hoy en el corazón de todos los teléfonos con Android.)
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Advertencia importante: si los siguientes párrafos te suenan a alguna clase de hermético dialecto carcelario, es 100% normal. Synfig es un programa de animación profesional y, como en toda profesión, especialmente cuando entra la informática en escena, la jerga es bastante abundante. Intentaré allanar esa dificultad con links explicativos (a Wikipedia, mayormente). Ilustradores y animadores decodificarán este lunfardo tech sin dificultad.
La historia de Synfig se parece a la de Blender. Synfig era el software que usaba un estudio de diseño que quebró (Voria Studios) y, entonces, el autor decidió abrir el código, registrar el programa como software libre y ofrecerlo sin cargo. “Prefería que todo el mundo usara mi software a que nadie lo usara”, dijo Robert Quattlebaum, creador de Synfig, en una entrevista que le hicieron en 2006.
El hecho es que Synfig sigue vivo, el sitio está activo, la última versión es del año pasado y el programa es muy bueno. Al menos, si te interesa el dibujo vectorial y la animación 2D. ¿Cosas que me gustaron aun sin entender mucho del asunto? Primero, vuela. Segundo, es muy fácil de usar. Tercero, es muy completo.
Entre sus características principales está que da soporte a tweening o intermediación; es decir, calcular los cuadros intermedios entre dos fotogramas clave para crear una animación convicente. Además, los objectos son vectoriales (independientes de la resolución, en suma), excepto las imágenes embebidas; ofrece soporte para imágenes HDRI; ofrece soporte para tabletas digitalizadoras; y, no menos importante, permite trabajar con capas. Pueden ver todas las características, aquí.
Obviamente, la aplicación tiene todas esas herramientas características de los programas de ilustración, más una serie muy completa de efectos visuales.
Synfig está en inglés, pero el manual puede leerse en español aquí.
Inkscape es compatible con el formato nativo de Synfig.
]]>No soy muy ordenado en general, ni mucho menos con el dinero en particular. Por eso es que no se me había ocurrido publicar este software en el blog hasta que Daniel P me hizo la consulta. Y aquí está, una joyita multiplataforma (funciona en Windows, Mac y Linux) que, además, tiene app para Android y que, al menos desde mi humilde punto de vista en estos menesteres, alcanza y sobra para las finanzas personales. Se llama Money Manager Ex (o MMEX) y, obviamente, es gratis.
Entre sus características principales está la de permitir crear monedas personalilzadas, presupuestar, mostrar de dónde viene y adónde va el dinero, ingresos versus gastos, flujo de caja, transacciones periódicas, seguimiento de acciones, resumen de cuentas y soporta encriptación por AES.
La interfaz es muy clara, aunque como ocurre en todos los programas de su clase, tenés que tener un mínimo conocimiento técnico para entender de qué está hablando la pantalla. Los informes se generan con sólo hacer clic en las etiquetas de la izquierda. El diseño visual no es de lo más lindo que he visto, pero no creo que esa sea una virtud muy solicitada en las aplicaciones financieras. Antes de que me lo pregunten, sí, funciona en Windows 7 y 8 e incluso hay instaladores para usarlo en Windows 95. ¡En serio!
Pueden ver muchas capturas de pantalla del MMEX funcionando aquí. No dejo capturas mías porque, como dije, no soy un usuario de estos programas y sin números insertados en la base de datos se vería bastante pobre.
Como siempre, si conocen algún otro muy bueno y gratis, avisen y lo añadimos.
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Como sabrás, el Bloc de Notas (Notepad, en inglés) de Windows es bastante limitadito. Es cierto, en la mayoría de los casos no vas a necesitar más, sobre todo si sólo trabajás con texto y tenés una buena suite ofimática instalada en el equipo. Pero si necesitás vértelas con código (en cualquiera de sus múltiples formas), vas a querer algo más potente.
Notepad++ permite ver texto plano, claro, pero está pensado sobre todo para escribir y editar código fuente en un número de lenguajes, desde Ensamblador y todas las variantes de C (incluida la que se usa para escribir apps para iPhone, Objective C) hasta Visual Basic, Perl, XML, Java, Javascript y Postscript, entre muchos otros (en total, son más de 50). Ofrece resaltado de sintaxis, la definición de sintaxis personalizadas, autocompletado de palabras y funciones, y una interfaz con pestañas completamente configurable.
Basado en el editor Scintilla y escrito en C++, Notepad++ está en español y es indispensable si, como mínimo, cada tanto necesitás echar un vistazo al código fuente.
]]>Escenario: sos responsable con tus datos y te acordás de hacer respaldo regularmente; incluso lo tenés automatizado. Pero hay casos en los que te gustaría que cuando creás o copiás un documento el backup se produzca en el momento. Ahora. Ya. Eso se llama sincronización en tiempo real y acá van un par de programas free que andan bastante bien: DSynchonize y Yadis! Backup.
La sincronización en tiempo real es algo así como el colmo del backup. Pero hay muchos motivos por los que podrías querer hacer copia de los archivos en un directorio (Mis documentos, digamos) a otra unidad de almacenamiento (un disco externo, por ejemplo). Sin ir más lejos, para desconectar la unidad externa al final del día y saber que te llevás a tu casa los documentos que necesitás para seguir trabajando o que preferís tener duplicados.
La mayoría de los programas de backup no funcionan en tiempo real, sino que producen el copiado o la sincronización a la hora programada por el usuario. En cambio, DSynchronize y Yadis! Backup hacen la copia de respaldo en el momento en que detectan un cambio en la carpeta de origen. Es decir, así como copiaste un nuevo archivo en Mis Documentos estos programas lo copian al disco externo. Yadis!, de hecho, guarda un registro de lo que no pudo sincronizarse, en el caso de que el disco externo no esté conectado, y hace el copiado cuando se enchufa la unidad externa. Ambos andan en Windows XP, Vista, 7 y 8.
La sincronización supone, además, que si borrás un archivo de la carpeta de origen, también será borrado de destino. Así que no son estrictamente hablando herramientas de respaldo, sino de sincronización, aunque ambos pueden funciionar como backups también (a propósito, con los buenos programas de backup también se pueden configurar tareas de sincronización).
No hay mayores diferencias entre DSynchronize y Yadis! Backup, excepto por la cantidad de memoria que usan. Yadis! consume 11 MB (mucho) y DSynchronize, 2,2 MB. Las interfaces son diferentes y en ambos casos imponen alguna dificultad la primera vez, pero nada grave. En los dos casos las fachadas son bastante feas, pero tampoco es que vas a mirarlos mucho tiempo. Una vez programados, hacen su trabajo por las suyas en segundo plano. Soportan copiado dentro de una red y DSynchronize también sincroniza con un FTP.
En mis pruebas funcionaron bien, aunque DSynchronize falló una vez al copiar un archivo cuando le arrojé a la carpeta de origen unos 150 documentos de toda clase. El autor aconseja, por eso, hacer una sincronización manual al menos una vez antes de intentar el método de tiempo real, cosa que yo no había hecho. Luego de eso, anduvo bien.
De todas formas, y se los digo por experiencia, los backups piden siempre algo de supervisión periódica.
Bueno, que los disfruten y si conocen alguno más que cumpla con esta misión, sea fácil de usar, confiable y free, avisen y lo agregamos. Si tienen dudas o correcciones o ambas, lo mismo.
]]>Desde luego, lo que hay que hacer cuando un Androide se pone caprichoso es, en primer lugar, esperar. Normalmente, después de unos minutos debería volver en sí. El número de minutos depende de la potencia de cálculo que tenga el equipo, la versión de Android instalada y las aplicaciones que estés usando.
Pues bien, una forma de visualizar que estos aparatitos son computadoras es instalar un monitor de actividad del microprocesador o CPU. Una de las sorpresas que te vas a llevar es que estos procesadores son bichos bastante inquietos. Entre otras cosas para no malgastar batería, los CPU móviles andan a los saltos todo el tiempo y hasta son capaces de bajar a un nivel de actividad a cero. Es bastante impresionante ver cómo operan, rebotando todo el tiempo entre nada y algo de actividad.
Esta vez, el primer freeware que probé fue el que más me gustó. Se llama Micro CPU Monitor y su principal ventaja es que el indicador de actividad aparece como una delgada línea de 1 pixel de ancho por encima del reloj; se puede elegir el color, la extensión y el fondo del gráfico.
Es razonablemente fácil de ver y al mismo no roba espacio en el área de notificaciones. Tiene también una versión comercial, pero la gratis es más que suficiente. No pide permises absurdos.
La otra app que me gustó fue CPU Monitor. Su indicador es más colorido y visible y, por lo tanto, más fácil de ver. Eso sí, ocupa lugar en el área de notificaciones y cuando se acumula información ahí puede quedar oculto. Además, este programa ofrece un listado de procesos ejecutándose y su correspondiente uso de CPU. Lamentablemente, su consumo de RAM es alto: 21 MB.
Tiene una opción para que el indicador sea numérico (al que también se le da por desaparecer cuando hay muchas notificaciones). Esta app tampoco pide permisos ridículos.
Vi en Google Play otros freeware para monitorear la actividad del CPU, pero solicitaban permisos exagerados (como, por ejemplo, geolocalizar el teléfono). Así que las descarté. Si encontraron alguno más que esté copado, avisen así lo agregamos aquí.
A propósito, el título de este post es un sencillo homenaje a uno de mis escritores favoritos, Philip K. Dick, autor de la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, que se usó como base para la película Blade Runner, de Ridley Scott. Otras dos enormes novelas de PKD son Ubik y El hombre en el castillo.
]]>La historia es así: cada tipo de luz tiene una temperatura de color diferente. Cuanto mayor es esa temperatura (que se expresa en Kelvin y que no tiene nada que ver con que los colores produzcan más o menos calor), más azul es el color. Al mediodía, en un día claro, la temperatura de color es de 5200 K. Si está nublado, 6500 K. La iluminación artificial va de 2700 a 3300 K.
Entretanto, la pantalla con la que trabajás durante todo el día (y eso incluye atravesar un amplio abanico de temperaturas de color) está fija en algún punto entre 6500 y 9300 K.
El programador Michael Herf, que trabajó en el Picasa de Google, cree que el display debe adaptarse a esta variación y, por eso, creó F.lux. Suministrándole las coordenadas geográficas y tomando en cuenta la hora del sistema, este pequeño programa sabe a qué hora cae el sol y desde un rato antes va bajando lentamente la temperatura de color de la pantalla para que sea menos azul que durante el día. O más anaranjado.
Aparte de la localización, que debe establecerse al iniciar F.lux por primera vez, el usuario puede elegir la temperatura de color por usar durante el día y durante la noche, así como la velocidad con que se producirá la transición. Para acceder a la configuración hay que hacer un clic en el ícono que aparece en la bandeja de sistema y luego en el botón Change Settings.
Es posible ejecutar una simulación de 24 horas haciendo un clic en el círculo que representa al Sol en la pantalla principal del programa. Está disponible para Windows (funciona perfectamente en Seven), Linux, Mac y iOS.
Lo vengo probando desde hace más o menos 15 días y todavía no logro decidir si es mejor o no adaptar la temperatura de color de la pantalla a las condiciones de luz del entorno. En todo caso, F.lux está haciendo su trabajo sin tropiezos y con menos de 4 MB de RAM; me pareció muy interesante compartirlo. Según Herf, usar F.lux ayuda a dormir mejor. En mi caso, no ha dado resultado. Al menos en ese sentido.
]]>Como se pueden imaginar, no entiendo absolutamente nada de GIS. Miento. Menos que nada. Así que no puedo reseñar este programa. Sin embargo, confío en la recomendación de Leandro, y mi amigo Eduardo Suárez (@esuarez) me dijo que el QGIS está bueno y es fácil de usar. Además, está en español.
Eduardo me explicó también que el estándar de los sistemas de información geográfica de software libre es GRASS, muy potente, pero más árido que el QGIS (que, dicho sea de paso, viene con un front-end para GRASS). Leandro me cuenta por mail que ha usado paquetes de GIS comerciales y que, sin embargo, muchas veces termina prefiriendo el QGIS.
Así que, los que entienden de esto, que lo disfruten
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Gracias a todos por los comentarios y las recomendaciones!
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Prácticamente toda la música que oímos hoy en nuestros dispositivos portátiles está en formato MP3. Eso significa que además de la información del audio los archivos contienen etiquetas de texto o tags. (En realidad, es un poquito más complicado, porque MP3 no tiene especificación alguna para etiquetas, pero hay estándares que se han ido estableciendo por el uso, como ID3.) Las tags son las que guardan el nombre de la banda y el álbum, el título de la canción, la posición del tema dentro del disco, etcétera. Es decir, permiten ver en la pantalla del dispositivo toda la información relevante sobre la música que estás oyendo y, todavía más importante para aquellos que oímos mucha música clásica, que el reproductor respete el orden de las pistas. Ah, y además estas tags se pueden editar. Les presento un freeware excelente para esta tarea, MP3Tag
Dependiendo de un montón de factores, habrá ocasiones en las que querrás editar las etiquetas de tus archivos MP3, convertir etiquetas en nombres de archivo o nombres de archivo en etiquetas, y hacer todo esto en masa.
Tal es la tarea los editores de tags, y uno de verdad sobresaliente es MP3Tag, del alemán Florian Heidenreich: claro, fácil de usar y con soporte parar los formates MP3, AAC, Monkey Audio, FLAC, MPEG-4 y WMA, entre otros. Muy pero muy configurable, con acceso a fuentes de datos como FreeDB.org y, además, en español, es esa clase de programa que hay que tener instalado, aunque lo uses de vez en cuando.
Les dejo un par de capturas.
Modemhead propuso dos alternativas, ambas excepentes. Primero, Picard, un muy buen programa de software libre. Un muy recomendable editor de tags. Segundo, MediaMonkey, un reproductor de medios con turbocargador que, entre muchísimas otras cosas, sirve para editar tags. Posiblemente lo trate cuando haga una reseña de media players. Existe versión freeware de MediaMonkey.
Angel, por su parte, encontró el EasyTag, que puede instalarse en la mayoría de las distribuciones más populares desde el centro de software.
]]>Permítenme presentarles un monitor de sistema que realmente sirve. Nació para Linux, tiene versión para Windows (incluso Windows 7 de 64 bits) y su único defecto es que tiene un nombre impronunciable: GKrellM.
UPDATE: Agregué al final del post el breve reportaje que le hice a Bill Wilson, autor de este programa. Tardé un poco en responderme porque estuvo fuera durante el fin de semana.
Conocí este programa el siglo pasado, literalmente. Era 1999, buscaba un system monitor decente para Linux y entonces salió GKrellM. Fue amor a primera vista. Desde entonces, está en todas mis máquinas con Linux. Quienes usen Ubuntu, simplemente vayan al centro de software e instálenlo. Son dos clics y no lo van a sacar del Escritorio nunca más.
La buena noticia es que existe también desde hace mucho una versión para Windows. Es el mismo programa, es decir, un port del original para Linux. Esto supone dos pares de limitaciones, que paso a enumerar.
Nada muy preocupante; diré mas, GKrellM es mucho mejor que otros monitores de sistema que he visto y probado en Windows. No sólo se puede personalizar con mucho detalle qué información muestra y cómo la muestra, lo que ya es una enorme virtud, sino que tiene una interesante colección de skins o temas (que, lamentablemente, hace mucho que no se actualiza). Además, puede usar la información del sistema para disparar, por ejemplo, alertas cuando se alcanza cierto límite. Ah, y permite ejecutar programas dándole clic a ciertos monitores (el calendario y el cliente de correo, por ejemplo).
Bajarlos (de a uno o todos en un archivo tar.gz) de aquí.
Descomprimirlos con 7-Zip.
Los archivos gz son los zipeados con GNU Zip o Gzip, y dentro encontrarán un .tar, o archivo de cinta de Unix (tape archive, llamado también en tono humorístico, tarball). En Windows lo más rápido es extraer dos veces con 7-Zip, primero el tar.gz y luego el tar. Obtendrán una carpeta. Copien esa carpeta al directorio .gkrellm2 que está en la carpeta del usuario (a pesar del punto, en Windows no es una carpeta oculta). La ruta generalmente es: C:Users{cuenta de usuario}
Cierren GKrellM, vuélvanlo a abrir y busquen la nueva skin con Av PÁG o Re PÁG o elíjanla desde el diálogo correspondiente, en la Configuración.
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Así que para mi es un número puesto. Pese a la poca difusión que tiene fuera del entorno Linux, creo que les va a encantar. En la colección de temas hay de todo, desde cosas verdaderamente chillonas y extravagantes hasta sobrias, bien diseñadas y claras. Mi favorita ilustra la apertura de este post, incluida la temperatura en el CPU. Les dejo otras imágenes a continuación. Les aconsejo NO bajar todo el pack de skins, son demasiadas y sólo van a usar una o dos. Mejor elegir del sitio las que más les gusten.
Ah, me olvidaba. El extraño e impronunciable nombre de este programa tiene una explicación: Viene de GNU (or Gtk) Krell Monitors (or Meters). Krell es una civilización extraterrestre de la novela Forbidden Planet, que en su versión cinematográfica aparece rodeada de monitores para vigilar su sistema energético.
Que lo disfruten: Comentarios, consultas, etcétera, serán bienvenidos. A propósito:
¿Algún otro sistema de monitoreo que realmente les parezca recomendable?
[See image gallery at blogs.lanacion.com.ar]Me puse en contacto por mail con Bill Wilson, autor del GKrellM. Este fue, poco más o menos, nuestro intercambio.
Ariel,
Me alegra que le hayas encontrado alguna utilidad a GKrellM y, ¡Dios!, parece que has estado usándolo casi tantos años como yo
¿Qué edad tenías cuando escribiste GKrellM?
Debo admitir de que ya era lo bastante mayor como para relajarme tomando una cerveza, en lugar de estar escribiendo software. Tenía 46 años en aquella época.
¿Qué te llevó a crear este programa?
âMi experiencia estaba relacionada con el hardware y siempre quise saber qué hacían mis computadoras en ese nivel. Quería un monitor de sistema compacto pero abarcativo que me mostrara de un vistazo tanto como fuera posible de lo que estaban haciendo mis máquinas. Originalmente iba a ser para mi uso personal y nada más, pero a medida que evolucionó quise devolverle algo al movimiento open source del que me había beneficiado.
¿Vas a mantener el GKrellM actualizado?
GKrellM ha alcanzado un punto en el que pienso que ya no necesita nuevas (o, al menos, muchas nuevas) características. Así que personalmente estaré satisfecho con sólo corregirle los bugs que aparezcan. Pero si se me ocurren ideas inspiradoras o si alguien empieza a enviar parches para implementar nuevas funciones, sin duda volveré a actualizar el programa.
¿Cuál es tu actividad profesional?
Empecé como ingeniero, diseñando circuitos, y luego fui programador durante unos años. Hoy estoy prácticamente retirado.
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