Podcast Cinescalero Volumen XVII / Revisionando los ’90: TITANIC

♦ ¿Qué veredicto dan ustedes en este nuevo podcast? ¿Cuánto se mantiene Titanic en el 2016? ¡Los invitamos a debatir! ¡Hasta el lunes, muchachada!

NO ESTÁS SOLO en el Centro Cultural de la Cooperación

Estimados, es mi placer anunciar que el recorrido de No estás solo en esto no ha finalizado. El documental tendrá nuevas proyecciones en este 2016 gracias al Centro Cultural de la Cooperación que demostró interés en la película gestada en este espacio. Asimismo, se trata de la presentación más “oficial”, dado que en esta oportunidad el cobro de entrada permitirá recaudar algo de lo invertido para poder cumplir con las recompensas destinadas a quienes colaboraron con el rodaje. De más está decir que espero ver en alguno de esos cuatro jueves de marzo a quienes no pudieron asistir a la UNA aquel inolvidable 18 de septiembre. Como siempre, gracias y más gracias por haber facilitado todo este camino. ¡Nos reencontramos mañana en un podcast! 

Grandma: El tiempo pasa, eso seguro

“The only way for a woman to find herself, to know herself as a person, is by creative work of her own” – Betty Friedan (The Feminine Mystique)

Grandma abre con la cita de la poeta Eileen Myles con la que me permití ilustrar este post. “Time passes, that’s for sure”. Luego en la pantalla aparece el número uno, sucedido por una sola palabra, “Endings”. De este modo, momentos antes de que se nos presente a Elle (Lily Tomlin en un extraordinario regreso a los protagónicos) ya podemos conocerla. En primer lugar, porque la división en capítulos del film de Paul Weitz tiene una connotación literaria que nos revela que esa mujer, ya en sus setenta años, fue, es y será siempre una mujer de las letras. Y esta afirmación va más allá de su profesión, de su trabajo como profesora o de su vocación de poeta. Elle hace de la palabra su aliada en la confrontación con el entorno y su verborragia es un escudo inamovible. Ésto nos lleva al segundo tópico que yace en la placa. El tiempo y su inevitable transcurrir. Hay algo de aceptación, de plena consciencia, de necesidad de acentuar lo obvio en esa frase de Myles. Casi que uno puede escuchar a Elle reflexionando de igual manera, con cierta ironía. El tiempo pasa, eso seguro. Ahora bien, ¿qué hacemos al respecto? Luego de perder a su esposa tras una batalla contra el cáncer, de alejarse de su hija y de arruinar voluntariamente una relación con una mujer más joven (Olivia, interpretada por la siempre brillante Judy Greer), Elle se recluye en su casa, en sus pilas de libros, en dibujos del pasado, en citas de otras décadas, en una suerte de santuario que niega la evolución. Como ya lo había hecho Will en About a Boy – otra película escrita y dirigida por Paul Weitz, por entonces junto a su hermano Chris -, Elle cree que cada persona es una isla y actúa con un egoísmo que se va perpetuando en charlas de lo más triviales que perfeccionan el ya impecable timming cómico de Tomlin. Asimismo, el tiempo pasa (eso seguro) para Sage (Julia Garner), la nieta adolescente de Elle que le golpea la puerta para plantear la urgencia del film: está embarazada, tiene una cita para realizarse un aborto y necesita dinero de su abuela. El quiebre de los estereotipos de Grandma tiene como germen el brusco choque de Sage con Elle. Su “grandma” no es una “grandma” más. Su grandma no tiene plata y depende de su única posesión invaluable, un Dodge modelo 55 que le pertenecía a su fallecida mujer (nuevamente el pasado como atadura inquebrantable) y que permitirá que abuela y nieta emprendan un road trip para juntar dinero y que la joven no pierda su turno médico. A medida que avanza el film, Weitz sabiamente define a su personaje central a partir de sus conversaciones con esas personas a las que les solicita ayuda. De esta manera, ese pasado/cruz de Elle se nos abre cuando ella misma se abre – más con necedad que con gracia – a los demás. Así, el núcleo de Grandma, representado por una brutal charla con su ex marido Karl (Sam Elliott, una contrafigura ideal para Tomlin), es aquel en el que esa mujer debe aceptar que sus acciones supieron moldear/afectar/demoler la vida de otra persona. Desde una clínica que ahora es un café hasta una primera edición de The Feminine Mystique que ha sido devaluada, en ese recorrido de apenas unas horas, Elle sale de su burbuja para reconocer que la vida de antes, la que aprehende todos los días, hace rato que dejó de representarla. Por esta razón, y en un acto tan pequeño como valioso, Elle abandona ese Dodge sutilmente, golpea (como su nieta) una puerta para suturar las heridas y se aleja como solo ella sabe hacerlo: en soledad, pero con todo un camino por delante. 

………………………………………………………………………………………….

► [TRAILER] El adelanto de Grandma de Paul Weitz:

Grandma Trailer from Florian Stadler on Vimeo.

………………………………………………………………………………………….

¡BUEN MARTES, MUCHACHADA! Hoy les dejo simplemente dos consignas: 1. Por un lado, explayarse sobre Grandma de Paul Weitz: ¿la vieron? ¿qué les pareció? 2. Por el otro, mencionar a sus actrices legendarias favoritas y alguno de sus regresos más recientes a la pantalla grande que les gustaría destacar; como siempre, los leo; nos reencontramos mañana con una buena noticia para el blog [OFF TOPIC] Con este post inauguro una nueva categoría del blog titulada “Indies” donde se recopilan todas las críticas que hice de esas pequeñas joyitas que se hicieron por fuera de lo mainstream, como modo de organizar las recomendaciones, espero que les sirva 😉

…………………………………………………………………………………………………

* RECUERDEN QUE SI QUIEREN SEGUIR LAS NOVEDADES DE CINESCALAS POR FACEBOOK, ENTREN AQUÍ Y CLICKEEN EN EL BOTÓN DE “ME GUSTA” Y POR TWITTER, DENLE “FOLLOW” AL BLOG ACÁ; ¡GRACIAS!

The Hunger Games – Mockingjay (Parte II): La dialéctica de Panem

Hoy en Cinescalas escribe: Verónica Stewart

El Escuadrón Estrella se reúne en uno de los tantos edificios destruidos del Capitolio. La guerra civil de Panem ha llegado al frío corazón del país, y Katniss y demás ganadores de los anteriormente practicados Juegos del Hambre se detienen ahora a planear su próximo ataque. Boggs, el comandante del escuadrón, les muestra un holograma que indica en qué calles hay trampas, a la vuelta de qué esquina se esconden los explosivos. Finnick Odair mira a Katniss. “Damas y caballeros”, dice “bienvenidos a los 76º Juegos del Hambre”. Recapitulemos: la trilogía de ciencia ficción de The Hunger Games, cuya última entrega se encuentra ahora en cines, tiene a Katniss Everdeen como protagonista y a Panem, un país ubicado donde Norte América estuvo una vez, como contexto. La primera parte de esta historia nos da un panorama del país y de sus Juegos del Hambre, una salvaje competencia televisada y organizada por el Capitolio para mantener a los distritos bajo control. Catching Fire, su secuela, nos revela a una Katniss Everdeen que, tras haber ganado los Juegos y teniendo que competir de nuevo en ellos, se dispone a encender la chispa de la revolución que ya viene gestándose desde hace rato. Finalmente, ambas partes de Mockingjay encuentran a Katniss a salvo en el Distrito 13 con su presidente Alma Coin quien, junto al pasado organizador de los Juegos Plutarch Hevensbee, se encargan de hacer de ella la cara mediatizada de la revolución.

La segunda parte de Mockingjay es ampliamente superior a la primera. La división entre ambas películas está hecha en el momento en el que Peeta, quien ha sido secuestrado – lo cual significa que el Capitolio ha logrado lavarle la cabeza hasta el punto de convertirlo en su sumiso servidor –, es recuperado por los integrantes del Distrito 13. La última escena de esta primera entrega es profundamente dolorosa: Peeta despierta queriendo atacar a Katniss, detestándola con cada fibra de su ser. Para quienes han leído el libro o incluso visto las películas, es innegable que la verdadera acción ocurre luego de este hecho, cuando la guerra civil llega a escalas terribles y tortuosas. El ritmo de esta última entrega es impecable: la escena de una cierta ejecución que queda a cargo de Katniss sobre el final de la película logra crear una tensión punzante entre el silencio de la sala, mientras que las varias batallas que se desatan en el Capitolio aturden a todo espectador que se siente envuelto en medio de esta guerra. La última parte de Mockingjay tiene muchos aciertos, entre ellos el hecho de ilustrar tan bien (y sin minimizar) el trauma del que sufre Katniss al terminar la batalla. Pero lo más importante de esta película es que nos ofrece algo que ninguna puede darnos: perspectiva. Al conocer el desenlace de esta historia, se vuelve más sencillo juzgarla de principio a fin, y el panorama completo de la historia de Katniss nos remite nada más ni nada menos que al esquema dialéctico del filósofo alemán Hegel.

Recapitulemos nuevamente: la dialéctica identifica tres grandes momentos en su esquema. El primero, el de la tesis, es aquel en el que se presenta determinada concepción del mundo, mientras que el segundo, la antítesis, expone sus problemas y contradicciones y propone una visión opuesta. Finalmente, la síntesis surge de una nueva comprensión del problema gracias a la implementación de elementos que se encuentran tanto en la tesis como en la antítesis; es decir, presenta una suerte de mezcla entre ambas. El principal motivo por el cual este esquema es tan utilizado para explicar procesos históricos es, sospecho, que somos criaturas propensas a la repetición. Se puede aplicar a momentos políticos y económicos tan diversos e incluso apartados en el tiempo justamente porque la política y la economía tienden a operar bajo los mismos mecanismos, una y otra vez. Una fuerza política sube al poder, en las elecciones siguientes se vota a quien más se le oponga y luego se opta por buscar un punto medio hasta que vuelva a comenzar el ciclo. Tan visionario fue Hegel en su concepción de la dialéctica que incluso se puede aplicar a una trilogía distópica como la de The Hunger Games.

Primera parte: la tesis. The Hunger Games nos da a conocer la concepción que se tiene del mundo desde el microcosmos que es Panem, el trato que reciben los más pobres distritos y los Juegos del Hambre, aquel sádico evento que representa el más estrecho vínculo entre ambas partes. Katniss, a pesar de encontrarle una vuelta a las reglas al final, participa en ellos. El pueblo todo todavía se encuentra sometido. Segunda parte: la antítesis. Catching Fire nos presenta a una Katniss mucho más segura de sí misma y determinada a acabar con la tiranía de los juegos. Toda la película se ve atravesada por pequeños actos de rebeldía, desde el vestido que se enciende en llamas en el programa de Ceasar Flickerman hasta la destrucción del domo virtual que hacía de los juegos lo que eran. Katniss literalmente destruye a aquello que más sometía al pueblo. Empieza la revolución.

Es en la tercera parte, en la de la síntesis, donde entra Mockingjay y donde más interesante se vuelve el asunto. Y es que a simple vista esta parte no es más que una agudización de la segunda, la más profunda antítesis ante la tesis propuesta por el Capitolio. Sin embargo, pronto comenzamos a observar cuántas de las actitudes de Coin y Hevensbee se asemejan a las del Capitolio. La televización de la batalla se vuelve crucial, y no quieren que Katniss, su tan adorado y explotando sinsajo, de pelea si no hay una cámara frente a la cual pueda jactarse luego. Lo que importa es lo mismo tanto en la revolución como en los mismos Juegos del Hambre: la estrategia mediática llevada a cabo debe ser perfecta, y el arma más grande no son ni las flechas ni las bombas, sino las imágenes en los televisores. Gale mismo dice que si tiene que morir gente inocente para que ellos puedan vencer a un distrito que sigue aliado el Capitolio, que así sea – inevitablemente, esto nos remite a la cantidad de inocentes que mató el Capitolio en su lucha por el poder. Aun manteniendo algo del espíritu revolucionario que prima en Catching Fire, en Mockingjay observamos con temor y un poco de asco cuán similares son todas las estrategias políticas, sin importar a quiénes favorecen ni qué fines cumplen. Coin es veloz para declararse presidente interina, en un proceso que nada tiene de más democrático que el del presidente Snow perpetúandose eternamente en el poder.

Es precisamente por esto que The Hunger Games se despide siendo una de las mejores sagas distópicas de los últimos tiempos. Teoriza, quizás sin quererlo, sobre los medios, la guerra, el trauma que ésta genera e incluso la política. Su mayor fuerza no descansa entonces en su historia de amor o en la valentía y vulnerabilidad que tan bien conviven dentro de su protagonista, sino más bien en cómo logra retratar el funcionamiento político y mediático todo a través de una sola historia de un solo lugar.

Por Verónica Stewart

■  Al texto escrito por mí sobre The Hunger Games lo pueden encontrar acá

■ Al texto escrito por Verónica Stewart sobre Catching Fire lo pueden encontrar acá

■ Al texto escrito por Natalia Paez sobre The Hunger Games – Mockingjay (Parte I) lo pueden encontrar acá

…………………………………………………………………………………………………..

[TRAILER] Algunas imágenes de Mockingjay – Part 2:

Mockingjay Part 2 Trailer from C M on Vimeo.

………………………………………………………………………………………..

¡BUEN LUNES PARA TODOS! Arrancamos una nueva semana del blog hablando sobre el cierre de The Hunger Games: 1. ¿Qué les pareció la saga en general y su conclusión en particular? 2. ¿Qué otras sagas resisten un análisis filosófico como el que propone Vero? 3. Por último, ¿son de leer sagas? ¿cuáles son sus favoritas? ; nos reencontramos mañana con un post sobre Grandma; ¡hasta entonces, muchachada! ¡que tengan un excelente día! PD. No se olviden del Concurso Oscars 2016, tienen tiempo hasta el domingo próximo para dejar sus predicciones; ¡buena suerte para todos!

…………………………………………………………………………………………………….

…………………………………………………………………………………………………………

—> La última vez escribió Victoria Leven sobre… MIA MADRE y EL CINE DE NANNI MORETTI

…………………………………………………………………………………………………………

…………………………………………………………………………………………………………

* RECUERDEN QUE SI QUIEREN SEGUIR LAS NOVEDADES DE CINESCALAS POR FACEBOOK, ENTREN AQUÍ Y CLICKEEN EN EL BOTÓN DE “ME GUSTA” Y POR TWITTER, DENLE “FOLLOW” AL BLOG ACÁ; ¡GRACIAS

Podcast Cinescalero Volumen XVI / Revisionando los ’90: CLUELESS

♦ ¿Qué veredicto dan ustedes en el “juicio” de hoy? ¿Clueless se mantiene en el 2016 o no tanto? ¡Los invitamos a debatir! ¡Hasta el lunes, muchachada! ♦