Con un video de producción propia, Adrián Sack demuestra cómo conviven pacíficamente rivales futbolísticos en España. Registró las imágenes en su viaje de regreso desde el Santiago Bernabeu tras el superclásico del sábado, a bordo de un vagón de la línea 10 de un metro madrileño cargado hasta el tope de hinchas de ambos clubes hablando tranquilamente sobre el partido que pasó y los tres que quedan adelante. Una lección de la que hasta Gandhi podría aprender.