“Zemba es un hermoso ejemplar felino de color negro que cumplio 8 años gracias a Maria Elena y Fernando, sus veterinarios, que le extrajeron un tumor cerebral hace un año cuando se estaba muriendo. Hoy lo tenemos con nosotros compartiendo su vida con su hermana Máxima y está muy malcriado y muy gordito”, dice Nora Vivas.
“Lullye llegó a mi vida hace un año y algunos meses y Godo, dos meses más tarde, entre ellos se llevan bien.
Ahora bien, yo he tenido que posponer algunos cambios y arreglos, por ejemplo, los tapizados están todos destrozados, me rompieron un vidrio de dos metros de alto, todos los días aspiro el departamento, duermo siempre acalambrado, ya que se me pegan al cuerpo, ambos.
El barrio esta lleno de papelitos (vivo en un sexto piso) y a Lullye le encanta verlos volar. Me cuesta salir por más de 24 horas, me divierto y el compromiso me hace mirar menos televisión. Soy feliz con su compañia”, nos cuenta Mario Díaz Méndez.
D:N:I: 92.274.241
Villa Crespo
“Esta es Volvoreta disfrutando de sus merecidas vacaciones. Juega y se baña en el arroyo de La Apartada, ubicada en La Población, Traslasierra, Córdoba. Como verán se proteje del sol y está muy feliz”, dice
María Rosa Bertran Iñurrategui.
“Acá está Wanda, la bella durmiente del hogar. Puede pasarse días tirada durmiendo, sobre todo desde que compramos un aire acondicionado!
saluditos”, dice Catalina Fisch.
Tabi tiene dos años, es una gran compañera y desde que nos mudamos aquí, hace cinco meses, se convirtió en la mascota del edificio”, dice Susana Dalbora.
Paola Pennachi nos cuenta: “Hola. Les escribimos para que conozcan nuestra historia.
Nosotras somos amantes de los animales y por tal motivo es que nuestra casa esta llena de mascotas: en total tenemos 15 perros, 6 gatos, 2 loros, 22 pájaros de todo tipo y muchas gallinas y patos. Acá van algunas de las fotos.”
“Esta es una dálmata muy manchada, que paradójicamente se llama Bianca. Es la cuarta de su raza cunsecutiva de la familia Mogillansky, de Banfield.
Sus dueños dicen que es la más mimosa de las cuatro. Pero lo que pasa es que a las otras los mimos se los hacían tres chicas, ahora con sus propias casas y mascotas; y a ésta se los tienen que hacer sus dueños, ya viejos, a los que les duele la cintura al rascarle la panza”, dice horacio mogillansky, a quien no le creemos que haga sacrificios para mimar a esta hermosura.
“Hola, quisiera mandar una foto de mi perra Sigrid (la de color negro) y contar su historia (en la foto está con su mamá Frida).
Teníamos una labradora dorada desde hacía cuatro años, Frida, que creció y creció, hasta que un día se nos escapo de casa luego del primer celo. Varios novios daban vueltas por la manzana, pero había uno que siempre parecía serle fiel: un labrador vecino, igualito a ella.
Pero había un segundo perro, un cachito como le decimos en familia, bajito negro y blanco, con la cola enrulada y los ojos saltones. Sacamos rápido el auto para ir a buscarla, dimos la vuelta a la manzana y ahí estaban los tres… ¿Quí habria pasado? la llamamos a Frida, se subio al auto muy obediente y partimos.
Nos dimos cuenta de que empezaba a engordar, pero no creímos que podría estar embarazada, hasta que una semana antes de que nacieran llos cachorros lamamos al veterinario, y nos dio la noticia. Nacieron cuatro dorados, dos negros y uno marrón, que falleció días despues. A todo esto no sabíamos quien era el padre.
Nos quedamos con Sigrid. Es muy guardiana de su mamá, la cuida y le encantan los muñecos. Son las dos muy mimadas, tanto que las dejamos dormir en los sillones del living y los cubrimos con un acolchado”, dice Belén Lucero, de Martinez, provincia de Buenos Aires.
Al principio llegó Luna, traída de una de las plazas de la ciudad en donde regalan a los perros por no poder tenerlos o vaya a saber qué cosa… el consenso familiar, más aún el de papá, lo permitió.
Al tiempo, llegó Luli, regalada por un amigo del colegio. Lograr convencer a papá creí que resultaría una tarea ardua, pero en sólo dos horas ese pequeño peluche tiritando de frío y de hambre ya era mío…
Y a los tres años de la llegada de Luli, llegó Corina, labradora negra con ojos tristes. Mi hermano nunca se pudo despegar, el tema es que en casa somos cinco, a eso sumale los novios, porque somos tres hermanos, la Nonna, más las dos perras, pero donde comen dos comen tres, y así sucesivamente.
Corina llegó con un poco de discusiones porque la familia no paraba de agrandarse, pero lo bueno es que las tres perras se tienen una a la otra como nos tenemos mis hermanos y yo”, dice este lindo e mail de Daniela Allegrucci, de La Plata.
Fernando tiene mucha calle. Durante muchos años fue el compañero fiel de un cartonero. Pero como si se tratara de una novela de Paul Auster, éste se enfermó. Fernando lo acompañó hasta sus últimos días y él mismo casi muere de neumonía. Tiene una historia intensa como para que continúe de la mejor forma: volviendo a ser fiel de la misma forma con un nuevo amigo/a. Fernando es grandote, con ojos color miel, bonachón y precioso; una mezcla de siberiano.
El contacto es: 4203-4075 o ROXANA: 1555028181.
