“Rocco cumplió ocho años y es un boxer canela que desde entonces llenó nuestros corazones. Compañero inseparable de todas nuestras salidas, le encanta pasear por el barrio llevándose él mismo de la correa o ir al kiosco y llevar en su boca la billetera ¿quién se animaría a robarla?.
Fiel, amigo leal, intelegente y muy cariñoso, compañero ¡lo amamos!”, dice la familia Gianinetto de Rafaela.
Les presento a nuestra familia numerosa, es imposible tener a los 5 juntos para la foto.
La gata es Rosita, la mimosa y regalona de la familia, despues estan Reina la ovejero belga, que ya tiene 2 años, la Negra que aparecio en la calle y se afinco en casa, hace mas de 5 años y Drugs el Weimaraner que comparte sus siestas con Patan el doberman negro de 1 año, que cuando no se pelean como perro y gato duermen la siesta comosi nada.
Todos comparten la casa con mi marido y mis 3 hijos.
Me encanta el blog de bestiario, aunque muchas veces lamento no tener más lugar para adoptar los animalitos que aparecen ahí”, dice
Alejandra Joukovsky
“Acá esta Gala (nuestra perra) y Pepa, nuestra gatita, que apenas tiene un mes y medio de vida y ya son íntimas amigas. Ambas se buscan todo el tiempo, se revuelcan, corren, se lamen, son nuestras hijas, malcriadas y hermosas”, dice Romina Casares.
“Buenas tardes. Esta preciosura está en adopción. Lo tengo yo, Jebus Jevus: 15-6755-2188.
“¡Hola! Yo soy Juno, Maltés de 5 años, con algún pasado de Bichón Frise, lo cual hace imposible que mi pelo quede lacio, y nadie puede peinarme, ni cepillarme, menos bañarme, por lo cual y a mi entero gusto, me entrego a las manos de mi peluquero particular que, obviamente, hace de mi lo que quiere.
Soy un misil, con nombre de asteroide, bastante difícil de manejar y malcriadísimo, aunque entiendo todo lo bueno y lo malo, pero hago “lo que quiero”. No me quedo ni un minuto quieto aunque tengo algunas cualidades y bastantes defectos, ya que hago pis donde se me ocurra, vivo ladrando, corro palomas, gatos y todo animal que no sea yo.
Como verán, mis abuelos Adolfo y Lise me malcrían bastante, a pesar de lo cual dicen que soy un bombón de dulce de leche muy bochinchero, mimoso, que tengo a todos enamorados, pero “en casa mando yo”. Ah! Amo mis galletas. No las como, pero me sirven de defensa cuando me “ponen” nervioso. ¿Se nota que soy nieto único? La que escribe es mi dueña, Adriana.
solange anabella dice que estos son los consentidos de la casa.
Se llama Teo. ¿No es lindo ?
“Un hijo, hermano y nieto del corazón. Hace un año y medio nos cambió la vida nuestro hermoso boxer blanco, nos saca la primer sonrisa de la mañana y la ultima de la noche. Nos ayuda a ser mejor personas. Malcriado como él solo.
Un perro de cas(z)a, un perro asesino de 40 kilos (porque la gente en la calle se cree que es un dogo y por la mala fama le tienen panico), un tiburón blanco”, dicen Juanchi y Gonza.
“Luego de leer muchas historias de mascotas, quisiera compartir la mía con ustedes. Me llamo, Veronica y tuve durante 13 años a Athos, mi bebé, un gato que adopté y amé con todo mi corazón. El 5 de noviembre del año pasado, Athos se fue al Cielo. Mi casa se tiñó de tristeza y ni mis padres ni yo podíamos pasar un solo día sin que se nos quebrara la voz al recordarlo. Fue por eso que el 3 de diciembre, decidí adoptar a Merlín.
En aquel momento tenía a penas 40 días y pesaba unos insignificantes 900grs., pero ya se notaba su personalidad picarona. Inmediatamente, nos conquistó a todos; incluso a mi novio, a quien nunca le gustaron los gatos, ese día lo llamó “mi” gato.
Días después de su llegada tuvimos que armar el arbolito de navidad y para Merlín fue una fiesta con tantos colores y brillos a su alrededor. Para él, era como estar en Disneylandia. Tuvimos que cuidar muchísimo el árbol y el pesebre, pero él se las ingenió para jugar con todo lo que estaba a su alcance.
Hoy Merlín tiene un año y 2 meses. Es la alegríaa de mis padres y, como yo me fui de casa, quedó como heredero de mi habitación, mis ositos de peluche y todo lo que encuentre en su camino. Ayer le compraron su primera bolsa de alimento balanceado de “gato adulto” y fue todo un acontecimiento. Nuestro bebé, ya está grande.
El día que llegó a casa, recorrió todo lo que pudo y hasta ese momento no supe qué nombre ponerle; lo seguí por todos lados hasta que se asomó por detrás de una puerta, me miró con tal picardía que me sacó mi primera sonrisa desde que Athos nos había dejado; en ese momento me di cuenta de que había sigo pura magia, algo que sólo un mago podía lograr, por eso se llama Merlín”, dice Verónica Teme
“Hola. Paquita fue mi compañera durante 16 años, el año pasado partió dejándome con un inmenso vacio. La heredé de alguien que la encontró en Parque Domínico y después no soporto que fuera tan destrozona.
Los años y la llegada de una bebe la aplacaron y convivimos junto a dos gatos la mar de felices. Siempre te recordare, siempre te amare”, se despide Cristina.
