Sólo por rendir homenaje a mi perra, que la amo con toda mi alma, y que el pasado 26 de febrero de 2010 me dejó, pero a pesar de todo, yo se que ella va a estar siempre con nosotros, y que siempre nos va a estar protegiendo como hizo toda su vida desde que tengo dos años.
Entraste a nuestra vida como una ángel, fuiste, sarás y sos la mejor perra y mascota que yo siempre quise y siempre voy a querer, saber que te amo con toda mi alma y que te extrañamos demasiado por acá y tu vuelta repentina no nos haría mal a todos, porque un poco de tu felicidad de todos los días no nos haría mal.
Nos dabas alegría todos los días, con tu pelaje negro y tu pecho marrón, me alegrabas las mañanas cuando me venías a saludar, me alegrabas las tardes cuando bailabas conmigo en dos patas, me alegrabas la vida con solo sentir que estabas viva y que eras mi perra, esa que me protegió siempre y que me amó siempre, a pesar de todo, y que nunca en mi vida voy a olvidar, porque marcó un punto de partida y un punto de llegada en mi vida, porque 11 años de mi vida estuvo conmigo y me acompañó siempre, como un ángel vigente siempre en las buenas y en las malas.
Por todas esas cosas que yo ame y siempre voy a recordar. Porque me hacés falta, porque sos esencial en mi vida y ahora no te tengo, porque te amo y nunca voy a olvidar esos momentos que pasamos, porque estas ahí siempre, te amo y te amamos, Loli. Siempre va a ser así y nada va a cambiar sin importar tu partida. María Victoria Barbieri.