El nuevo mapa del arte se ha extendido de manera viral a las provincias, el primer adelantado fue el Macro de Rosario, creado durante la gestión de Fernando Farina para albergar una colección de arte argentino contemporáno donada, prácticamente, por los artistas. El segundo do de pecho lo ha dado Córdoba, que tiene ahora un triángulo del arte con el Museo Caraffa, el Palacio Ferreyra, reacondicionado para ser museo y albergar la colección de arte argentino (con foco en la pintura cordobesa) de las colecciones patrimoniales, y la vieja cárcel del Buen Pastor, reciclada.
Hay en la docta un grupo de gente que rema fuerte para posicionar a los artistas mediterráneos en las grandes ligas, entre ellos, Fernando Allievi, Ferrero, Antonio Seguí, Tomás Bondone, Maru Becerra, Marcos Espinosa, Alejandro Dávila, hoy director del Caraffa, que el viernes entregó los premios anuales de fotografía, con el apoyo de la Asociación de Amigos, a Res, Gian Paolo Minelli y a Esteban Pastorino. Tres estéticas diferentes confirman el dominio de la foto y su avance en el patrimonio de los museos.
Res, cordobés, como Hugo Aveta y Ananké Assef (dos consagrados con imágen propia y proyección internacional) es un despiadado investigador de la naturaleza humana, que busca desnudar en sus fotografías las relaciones, los afectos, los miedos y, hasta, el adn familiar, como en la premiada (arriba) por AMEC (Asociación Amigos Museo Emilio Caraffa Córdoba).
Suizo de Lugano, Minelli (foto arriba) vive desde hace años en Buenos Aires y ha logrado llegar con su cámara a ciertos mundos marginales, a los secretos propios del universo suburbano de Villa Lugano, y otros, con la certeza de un “local”. En este caso su foto es de una sutil belleza, abstracta y lunar.
Ya se conoce en los circuitos de iniciados cuál es la liturgia fotográfica de Pastorino (foto abajo), quien captura sus imágenes con un dispositivo epecial, que le permite tomas de amplitud 180 grados, el formato es lineal, apaisado y de riguroso perfeccionismo.
Bravo por ellos y por el museo cordobés, que cosecha frutos sembrados en tiempos de Daniel Capardi. Blogeros pueden votar x una de las fotos premiadas para subir a la colección virtual.
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Difícil encontrar una imagen que pinte mejor al gaucho y sus costumbres que esta estampa de fino valor iconográfico. La acuarela está en el áalbum del pintor viajero León Pallière, pieza clave de la colección majestuosa de Bonifacio del Carril, que la casa de la calle Juncal subastará a partir del martes a las 16.30, con un estimado de U$ 15.000.