Recibo al hilo tres mails con fotos de obras de Milo Lockett  que anuncian sendas muestras del chaqueño en la Dirección de Cultura de  San Isidro, en el lobby del Panamericano, en  Espacio Darwin del Hipódromo, más la superproducción que exhibe en su propia galerÃa de la calle Humboldt al lado de Elsi del RÃo, más obras que tiene colgadas Teresa Anchorena en su galerÃa de Acevedo 850, más las que aparecen en subastas benéficas y de las otras. Hay Milos hasta en la sopa.
¿Un artista o una fábrica? ¿Un pintor o un capo del marketing? Estas y otras preguntas circulan en el mundo del arte desde que Milo irrumpió de la mano de Teresa Anchorena en arteBA , ¿siete?, años atrás y vendió sin parar 70 , si digo setenta, obras. Linda imagen, bajo precio y una estética entre naif y decorativa que le gusta a todo el mundo.
Cayetana , mi alumna de El Salvador,  que trabajaba con Tere Anchorena y hoy es mano derecha de Ignacio Liprandi,  opina que lo favoreció la imágen naïf, la novedad, el precio, el efecto taste maker de Teresa y el apoyo de los medios, que se fascinaron con la historia del chaqueño sincero descubierto por la galerista paqueta en una plaza de Resistencia pintando coloridos cuadros con un estilo infantil.
Desde entonces no ha parado de vender acá y en todo el paÃs. En Córdoba estuvo primero con Alejandro Dávila y hace una semanas en Praxis &.Marcos Espinosa con gran éxito de ventas. Casi me caigo de espaldas con el enorme stand que tenia en Expotrastiendas  y por la cantidad de  puntos rojos que indicaban ventas. Los precios desde  3500 a 12.000 pesos.Â
¿Qué pasa con Milo? ¿Cuál es la clave de su éxito? ¿Por qué  el Chino (simpático compañero del diario) tiene sus obras en el movi como fondo de pantalla?
¿Por qué mi sobrino Marcos, que nunca comprò un cuadro, le compró 4 y lo ama? ¿Por qué tiene tantos detractores?
Mi amiga Maru opina que Milo Locket es como Marcelo Tinelli, al que “nadie ve”, pero hace veinte años que calienta la pantalla y no para de ganar raiting.
 Autodidacta, Lockett viene de la industria textil, conoce los mecanismos del marketing y los aplica, sabe cuál es su target: a)  los coleccionistas (que compraban todo lo que vendia Anchorena); b)  los jóvenes que nunca habÃan comprado un cuadro; c) todo el mundo  que reconoce su obra como algo familiar y lindo.
Fue entre otras cosas autor de  la imagen que hilvanó el suple deportivo de La Nación de las olimpÃadas chinas, el cuadro inspirador está hoy en un pasillo del diario.
 Hasta le salieron imitadores, me cuenta hoy en clase una alumna de la UNSAL.  ¡No quiero imaginarme lo que hubiera sido una dupla entre Nacho Gutiérrez ZaldÃvar  y Milo Lockett!
Blogeros: el enigma anterior era  Olafur Elliasson (1967 Dinamarca) que ganó el corazón de todos con su obra The Weather Project en el Turbine Hall de  la Tate en 2003. Gracias a la blogera de Miami por el comentario y el  video de Vic Muniz.
No hay enigma esta vez, pero sà una invitación a participar: ¿Qué opinás del fenómeno Milo Lockett?
