Heep Hop, el fetichismo de los tacos al gimnasio

 

Ayer vi a una bailarina de tango arriba de unos zapatos fetish increíbles, y pensaba cuan poderoso puede ser el efecto del diseño para que haya tanta carga erótica en un miembro del cuerpo tan menor como el pie.

Ahora que Sarah Jessica Parker anunció que se bajaba de sus tacazos porque le habían destrozado los metatarsos, encontré una noticia curiosa y una foto que demuestra lo contradictorio de algunos países, en especial, Corea del Norte, donde el 10% del ejército está compuesto por mujeres que visten uniforme, casco, escopeta y tremendas plataformas en los pies (no sé a qué temerle más!). Y así andan, dicen, patrullando las calles de la ciudad de Sinuiju.

nunca sin ellos…pero no para el gym via fishnetsfridays

Y hay más: según Huffingthon Post, la universidad estatal de Dusambé, en Tayikistán (ex URSS), dictaminó hace meses que todas las estudiantes deberán usar zapatos con taco alto como requisito indispensable para asistir a clase. Curioso es que la idea partió del mismo rector, un tal Abdujabbor Rahmonov, que ya había saltado a la fama cuando prohibió usar barba a los profesores. O el tipo es un fetichista total, o es cierto que quiere “nivelar” el estatus social del alumnado exigiéndole que usen ropa de un solo color y tacos de no más de 10 centímetros. Un caso igualmente anecdótico fue noticia en 2008: el estudio de abogados Freshfields Bruckhaus Deringer, de Londres, incluyó en sus políticas internas un catálogo de consejos para sus empleadas, en el que sugería usar unos buenos tacones para “abrazar su feminidad”.

Pese a que no son saludables, y me pregunto cómo hacían las señoras de antes para andar divinas por la calle montadas en tacos finitos y puntudos, a una ex bailarina de realitys se le ocurrió dar clases de “heel hop”, o como hacer abdominales y step arriba de los stiletto. El cerebro detrás del invento es Kalilah, o como ella misma se hace llamar, “la reina de los tacones” (miren el video por favor). Ya abrió un estudio en Los Angeles donde tiene alumnas y todo pero, viendo lo ávidos que estamos los seres humanos de pavadas, seguro que en un mes lo estamos practicando acá.

No me tendrán!. Adoro mis tacos, pero sé que como bien decía la escritora norteamericana Sue Grafton “si los tacones fuesen tan maravillosos, los hombres los estarían calzando”….