En abril pasado, Coca-Cola puso al aire “Families”, un nuevo comercial creado por la oficina madrileña de McCann Erickson. El mismo universo feliz que la gaseosa nos entrega en sus piezas publicitarias desde siempre, con un detalle que podría considerarse histórico: entre los diferentes formatos de familia que presenta el spot, una pareja gay de hombres enfrenta, como el resto de los grupos familiares “no tradicionales” que protagonizan la idea, el planteo de su hijo. Y para que no queden cabos sueltos, el claim de remate para que nada se corra de su lugar: “La felicidad siempre es la respuesta”.
La maduración global en la aceptación de libertades individuales ligadas a la orientación sexual no ha provocado, hasta ahora, reacciones proporcionales en las superficies comunicacionales de las marcas de consumo masivo. Por eso la importancia de la campaña de Coca –criticada severamente por sectores ultracatólicos en países como España– y por eso también la trascendencia del trabajo que la agencia Venables Bell & Partners acaba de estrenar para el producto My Business de Google, herramienta de la compañía orientada a la pymes.
Aquí “City Gym”, la pieza dirigida por Eliot Rausch, de la productora Über Content: Seguir leyendo